A pesar de que en el plano deportivo las cosas no han ido bien, la experiencia a nivel global ha sido muy positiva. Y la culpa de ello la tiene en gran medida la Organización. El plano técnico ha estado perfectamente cubierto por Arista (se nota que son profesionales, se nota que también son corredores y se nota que saben lo que tienen entre manos), pero quiero destacar sobre todo el cariño y el esfuerzo que se ha puesto desde el Ayuntamiento, porque verdaderamente han conseguido poner "alma" a la prueba. Hay mucha diferencia, y es fácilmente perceptible, cuando una prueba se organiza con el único objetivo de generar una rentabilidad econónomica (por desgracia en Madrid tenemos bastantes ejemplos, principalmente en pruebas de asfalto), y cuando hay mucha pasión y entrega desinteresada detrás con el único objetivo de que los corredores disfruten de la experiencia.
Sólo tengo palabras elogiosas para ellos. Y especialmente quiero destacar y agradecer la minuciosa labor de Susana Gómez, responsable de las actividades de juventud y deportes del Ayuntamiento de Haría, y de las personas de su equipo.
Así que me alegro mucho de haber venido y de haber conocido la zona, y tengo claro que me apetece volver por aquí para correr con algo más de calma que hoy por esos acantilados, sendas y pistas que nos ofrece la zona de Haría. No será tarde.
Por último, destacar también el ambiente de los corredores en la carrera y lo agradable que es el trato con la gente de las islas. Cuántas cosas podemos aprender de ellos los habitualmente estresados corredores peninsulares -centrales-.
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