Creo que poco a poco ya vamos todos asimilando la realidad. Luisja no volverá a correr con nosotros.
Pero a la vez creo que poco a poco el sentimiento de tristeza tiene que dar paso a un sentimiento de admiración por la vida que vivió.
Fue una vida plena, sin fisuras:
- Disfrutó de cada día de su vida, y en los últimos 20 años aún mucho más intensamente gracias a su afición por correr
- Hizo feliz a los que le rodeaban
- Ha dejado un legado magnífico en su pueblo y en el mundo atlético madrileño
Y todo esto está quedando claro con la cantidad de homenajes que ya se han celebrado y los que se están preparando en su nombre. Hay que ser un tío muy grande, alguien muy especial y muy querido para que todo esto surja desde la espontaneidad de la gente.
Espero que finalmente la nueva pista de Colmenar lleve tu nombre para que tu memoria perdure aún más en el tiempo.
Hasta siempre Luisja, ha sido un honor haberte conocido.
He corrido junto a Luisja un par de MAPOMAS y bastantes medias... todavía no me lo creo..
ResponderEliminarSiento impotencia y ganas de llorar.
Descansa en paz donde quiera que te encuentres.
Piraña