La Residencia de Estudiantes y la Formación Integral de los Individuos

Llegué a este tema hace unos días en una conversación con Benito Pérez, Director del Instituto de Ciencias del Deporte de la UCJC, y he aprovechado estos días festivos para profundizar en todo lo relacionado con él.

Comentábamos la importancia que tuvo el Deporte y la Actividad Física en la "Residencia de Estudiantes", principal centro cultural del Madrid de la Edad de Plata, y por donde pasaron personajes claves de las ciencias y las artes españolas como Unamuno, Ortega y Gasset, Lorca, Dalí, Buñuel, Ramón y Cajal, etc., junto con visitantes internacionales de primer orden en numerosos campos como Einstein, Le Corbusier, Keynes o Chesterton.

La insitutición que comenzó en la calle Fortuny de Madrid y luego se mudó a la "Colina de los Chopos" (calle Pinar) acabó siendo el centro de formación de cuatro de los siete premios Nobel que tiene nuestro país. Pero además, la Actividad Física y Deportiva era una apartado clave en la Residencia de Estudiantes, heredando la mejor tradición helenística y de la Paideia de la Antiga Grecia. El propio emblema de la institución, la "Cabeza del Atleta Sabio", lo deja muy patente.

También eran habituales entre los residentes las excursiones montañeras al Monte del Pardo y a la Sierra de Guadarrama. Deporte y naturaleza eran la mejor combinación para el desarrollo de cuerpo, mente y espíritu. Curioso.

Hoy en día el centro sigue abierto, es controlado por el CSIC, y tiene numerosas actividades y exposiciones. Ésta es su web por si alguien quiere profundizar más en todo lo relacionado.

Adjunto algunas imágenes de varios de sus residentes realizando actividades deportivas, con el mérito de que en aquellos tiempos era considerado una excentricidad: Una fotografía de Buñuel, habitual prácticante del boxeo y del lanzamiento de peso, una competición de salto de altura en las instalaciones de la Residencia y un grupo de mujeres jugando al hockey, lo que también sitúa a esta intitución como pionera del deporte femenino en nuestro país.

Como siempre es una maravilla reflexionar sobre los orígenes y las actividades de época pasadas, me dejo en el tintero para otro post realizar también una pequeña reseña sobre el "Cerro de los Locos" en la Dehesa de la Villa, donde a mediados de siglo XX se juntaban de manera diaria un grupo de visionarios y pioneros del desarrollo físico-deportivo en la ciudad de Madrid. Por suerte, en su día pude conocer a alguien habitual en aquellos encuentros. Todavía hoy quedan vestigios de las herramientas naturales que utilizaban para su fortalecimiento.

Por lo demás, ya de vuelta mentalmente en 2010 tras haberme evadido durante un ratito apasionante a otros tiempos, ahora toca irse al Bosque de Valdelatas a hacer unas cuestas y luego a presenciar in situ el Cross de la Constitución de Alcobendas. No veo qué más se le puede pedir a una mañana de Domingo.